Soy la Grinch del Día de las Madres. Detesto el sábado previo, de centros comerciales abarrotados y tráfico enloquecido. No soporto la obligación de dar regalos, salir a comer con la suegra y creer que es un día especial. Ya sabemos aquello de que el Día de la madre son todos los días y blablabla…
Tampoco me hace gracia eso de que me lleven el desayuno a la cama. ¿Quién habrá inventado semejante insensatez? Supongo que los romanos, que adoraban comer acostados.
Tampoco me hace gracia eso de que me lleven el desayuno a la cama. ¿Quién habrá inventado semejante insensatez? Supongo que los romanos, que adoraban comer acostados.
En el Día de la Madre te sorprenden con el desayuno y no hay forma de levantarse a hacer pipí. Luego está el ejercicio de equilibrista requerido para que la bandeja amorosamente preparada no termine en el suelo o regada sobre las sábanas. También es importante pensar en el dolor lumbar que a ciertas edades produce el mucho rato sentada con las piernas estiradas, toda una calamidad para la circulación. Los médicos recomiendan a los insomnes como “higiene del sueño”, huir de la cama para cualquier cosa que no sea dormir o hacer el amor: nada de comer o ver televisión o leer en ella.
Comer en la cama parece tan insufrible como agradable. Por un lado se inventan artefactos para amortiguar los percances, y por otro se ponen de moda los restaurantes con camas protagonistas. Entre gustos y colores…
Comer en la cama me parece asunto de enfermedad y hospitales. Yo prefiero levantarme y hallar una mesa bien servida.
Comer en la cama me parece asunto de enfermedad y hospitales. Yo prefiero levantarme y hallar una mesa bien servida.
Esta colcha o sobrecama está hecha en una tela impermeable
y tiene incorporado un práctico babero. Los colores dan la idea de un picnic.
y tiene incorporado un práctico babero. Los colores dan la idea de un picnic.
Este Buddah Bowl es una manera fácil y cómoda de comer cereales en la cama.
Su asa en la parte inferior permite tomarlo fácilmente
y es apta para microondas y lavaplatos.
Su asa en la parte inferior permite tomarlo fácilmente
y es apta para microondas y lavaplatos.
En Amsterdam —con sucursales en otras metrópolis—
está el Bed Supper Club, un restaurante donde la gracia
es comer en una cama y sobre una badeja.
está el Bed Supper Club, un restaurante donde la gracia
es comer en una cama y sobre una badeja.
Duvet, es un restaurant en New York con treinta camas
que hacen las veces de asientos.
A los clientes se les ofrecen unas pantuflas del local al ingresar al mismo.
Duvet se especializa en comida fusión americana,
y es utilizado también para fiestas privadas.
que hacen las veces de asientos.
A los clientes se les ofrecen unas pantuflas del local al ingresar al mismo.
Duvet se especializa en comida fusión americana,
y es utilizado también para fiestas privadas.
Si pese a todo comer en la cama brinda a alguien placer, en materia de bandejas hay variedad:
Para quienes hacen de la comida y la cama un rito inseparable, hay otras mullidas opciones:
1 comentario:
Jejeje,todos tenemos una anécdota de "llevarle a la cama el desayuno a mamá". Cuando yo tenía como 9 años mi hermana de 7 fue a entregarle a mi mamá su regalo del día de la madre. Era un primoroso juego de tacita de café con su plato... Apenas se acercó a la cama se enredó con la colcha, así que tacita y plato rodaron y, mi hermana entre lágrimas, le entregó a mi mamá varios trozos de porcelana primorosamente envueltos en celofán.
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